Son 18 equipos de la Liga MX los que se enfrentarán contra los 29 de la MLS, por ser campeones de la Leagues Cup.
Y si no es obligación ganarla para los equipos mexicanos, para los llamados “grandes”: América, Chivas Cruz Azul y Pumas, más los poderosos Tigres y Monterrey, sí es por orgullo mostrar qué futbol, qué Liga, está por encima de la otra.
Pero “no será nada fácil”, manifiesta Alan Pulido, delantero mexicano del Sporting Kansas City.
Ya han quedado atrás, han pasado, los años en donde los cuadros de la Major League Soccer eran sólo comparsas de los de la Liga MX, un cheque al portador con victoria —y a veces goleada— garantizada.
Pulido lo asegura como parte activa, desde hace tres años, del futbol de Estados Unidos: “Estos juegos en la Leagues Cup no van a ser tan fáciles para nadie, no habrá mucha diferencia en los marcadores, de eso estoy más que seguro. Todos deben tomarla muy en serio”.
Antes, no hace muchos años, los suficientes para aún acordarse, “era marcada la diferencia de nivel, pero ahora eso ha cambiado. Todo se ha emparejado, y eso es bueno”, reitera el surgido en los Tigres.
Muestra de esto es “el Seattle [Sounders] que ganó hace poco la Concachampions. Esta Liga, y no es exageración, va para adelante y esto no se va a detener. Veo que hay mucho más por avanzar”.
Así que ha llegado la hora de la verdad. Fuera de temas de Selecciones, hay que dejar claro hacia dónde irá el balón: Hacia la tradicional Liga MX o la moderna MLS. Al final, esto es cuestión de orgullo.
