CHIHUAHUA.- El 21 de abril de 1915, durante la Revolución Mexicana, una soldadera llamada Manuela Oaxaca dio a luz en Chihuahua a un hijo producto de una relación con el aventurero irlandés Francisco Quinn (quien era seguidor de Pancho Villa), el cual fue nombrado Antonio Rodolfo Quinn Oaxaca pero con el paso del tiempo se convertiría en un afamado actor de Hollywood mejor recordado como “Anthony Quinn”.
Su madre estuvo mucho tiempo tras los pasos de su marido, participante de las huestes de Pancho Villa, y con una gran abnegación y sacrificio realizó labores de lavandera para mantener a Antonio en haciendas de Ciudad Juárez y El Paso (Texas).
Por fin, en 1919, marido y mujer se reunieron y se trasladaron como inmigrantes a California donde Antonio creció y desarrolló su carrera como actor participando en más de 108 películas, ganando 2 premios “Oscar”, un “Globo de Oro” y numerosas distinciones.
Luego de haberse casado en 3 ocasiones pero haber tenido 13 hijos con 4 mujeres, murió el 3 de junio del 2001 a los 86 años.
Un año antes, luego de cumplir sus 85 años, Anthony Quinn vino a Chihuahua el 29 de abril del año 2000 invitado por el entonces gobernador Patricio Martínez para develar una estatua en el parque «El Palomar» que inmortalizó la actuación de su personaje del recordado filme «Zorba el Griego».
Como fue su voluntad, una parte de sus cenizas fueron arrojadas en el Cañón del Cobre en Chihuahua y el resto yacen en su finca en California.
POR: REDACCIÓN
